Siento no haber escrito estos días pero es que he estado tan atareada con las rebajas que no he tenido tiempo ni de sentarme delante del ordenador.
Las rebajas, que mundo tan apasionante! Despierta los instintos básicos de cada persona, carreras, empujones, peleas…..No te puedes descuidar ni un momento, si ves algo que te interesa ya puedes agarrarlo bien, como leona que engancha a su presa, porque como te descuides, zas! ya te lo han birlado! Y esto los primeros días porque si dejas pasar un par de ellos, oye! no sabes cómo pero no queda nada, parece que ha pasado la marabunta, sólo quedan cadáveres, que esto, traducido a prendas, son un montón de trapos que año tras año salen de sus cajas polvorientas a ver si alguien pica, pero no, ahí quedan para el siguiente. A no ser que llegue un alma caritativa y diga, venga como estas muy rebajado me lo llevo, ya pensaré para que lo puedo usar (una fiesta de disfraces de los ochenta?). Hay cosas que no tienen tanta suerte y los ves ahí año tras año, como el discurso del Rey o los guiris borrachos en la playa.
Para ir de rebajas lo primero es organizarse, igual que en periodismo la clave es: el qué, cuándo, cómo, dónde y aquí también es importante con quién.
- El qué: es decir, a la caza de qué voy? Lo mejor es tenerlo fichado de antes, así vas a tiro hecho, normalmente sales con tres prendas más, pero por lo menos te has llevado el vestido tan chulo que viste.
- El cuándo: Contra antes mejor, porque si no te llevas las tres prendas que no tenías pensado comprar y no necesitabas, eso si, estaban baratísimas. También es importante evitar las horas en que haya mucha gente, porque si no te ves en bolas en medio de la tienda por tal de no hacer cola en el probador, aunque lo mismo así te hacen una rebaja adicional.
- El cómo: Hay que ir lo más cómoda posible, prohibido tacones altos, porque no aguantas ni dos asaltos, y al final te tienes que comprar unas bailarinas para poder seguir comprando, pero mira! eran monísimas de la muerte.
- El dónde: Centro comercial o zona comercial? He ahí la cuestión. En el centro comercial te vuelves loca con tanta tienda junta pero al menos no pasas frío, eso si tu tarjeta se puede quedar tiritando. Ir por las calles de tienda en tienda, sin embargo, hace que se te quede el culo helado pero al menos tu tarjeta lo compensa echando humo, eso si haces más ejercicio. Conclusión tu tarjeta muere o entra en la UCI en ambos casos.
- Y con quién: Esto es casi lo mas importante. Es fundamental agenciarte un buen perchero humano, es decir, un amigo, novio, marido, madre, etc, que te acompañe a todos lados sin rechistar (bueno esto dependiendo el caso se cumple mas o menos, algunos se ponen un poco pesaditos), que te diga lo bien que te queda todo, y lo mas importante, que cargue con tu abrigo, bolso, las bolsas de las nuevas adquisiciones, y todo lo que pueda molestarte para probarte un modelito tras otro. Y si tienes mucha suerte, que después te invite a comer para reponer fuerzas o te invite a algún trapito, no vamos a negarnos. El factor masculino es importante, porque no corres tanto riesgo de pasar tú a ser el perchero humano.
Asi que ya sabéis, elegir bien el qué, cuándo, cómo, dónde y el con quién, pero sobre todo disfrutad de las rebajas, se pasan unas tardes increíbles. Esto si es una buena fiesta!!
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